Septembre - Octobre 2021
La buena mentira (à traduire)
Estados Unidos, 2014 Título original: The good lie Dirección: Philippe Falardeau Guión: Margaret Nagle Reparto: Reese Whiterspoon, Corey Stoll, Thad Luckinbill, Ger Duany, Arnold Oceng. Nota Cinecritic ![]() |
|
Philippe Falardeau tiene claro que con "La buena mentira" quiere hacer un film de denuncia social, para gritar las injusticias del mundo pero siempre en un tono suave, pausado y equilibrado. Ya lo demostró en su anterior trabajo "Monsieur Lazhar". Ahora, en "La buena mentira", rodada, esta vez en los Estados unidos y en inglés (la anterior se desarrollaba en Québec, lugar de nacimiento del director y estaba hecha en francés) pone de manifiesto que desea seguir la misma senda. Se trata de un film, ante todo, cálido, en las formas, pero extremadamente duro en el fondo, con algunas escenas impactantes. La historia que narra está basada en el genocidio sudanés y gira alrededor de una familia de hermanos que se ven abocados a huir desde Sudán hasta Kenya para sobrevivir, después de la matanza de su poblado. Inspirada en hechos reales, el film empieza en Africa y narra la lucha desesperada de este grupo de niños por huir de una muerte más que segura y por encontrar medios de subsistencia. "Los niños perdidos del Sudán", como se les ha denominado, hacen prueba de una fortaleza y de un coraje, que impactan, desde las primeras escenas de la película. Un viaje hacia la vida y la supervivencia que Falardeau rueda con brío y serenidad. Muestra escenas terroríficas pero esconde otras, sobre entendidas, con una delicadeza muy propia de su cine. A lo largo de ese camino durante el que recorren miles de kilómetros, el grupo de hermanos irá sufriendo el hambre, la violencia y desgraciadamente la pérdida de algunos de sus miembros. Hay como una segunda parte de la película que se desarrolla en los Estados Unidos. Aunque, al final, como en un bucle del destino, volvemos a las raíces, donde adquiere sentido el concepto de "buena mentira". Un engaño que sirve para sobrevivir, una forma de entender que los desheredados de la tierra están obligados a sacrificarse siempre frente a los poderosos. Las escenas que se desarrollan en los Estados Unidos, donde aparece la actriz norteamericana Reese Whiterspoon, dando vida a Carrie, la asistente social que acoge a los hermanos sudaneses, recién enviados de un campo de refugiados en Kenya, es más desequilibrada que la primera parte del film. Aun así, es excepcional el trabajo de Whiterspoon dando veracidad y gran energía a su personaje y demostrando que todavía existen personas generosas en el mundo. Hay algunas escenas un poco repetitivas y no está del todo bien narrado el proceso psicológico de los hermanos sudaneses, trasplantados como objetos de una sociedad de atraso y pobreza extremos a la meca del capitalismo mundial. Sin embargo, en este sentido, encontramos las partes más divertidas del film, en las que los sudaneses se ven confrontados a cosas banales, para nosotros, pero absolutamente increíbles para ellos, como una escalera mecánica, un teléfono o una pizza. Por ello, "La buena mentira" tiene el mérito de hacernos reflexionar sobre los contrastes Norte-Sur, sobre la generosidad en el mundo, sobre la bondad y sobre lo absurdo de las guerras, pero siempre en un tono conciliador y sereno. Falardeau se confirma con este film como un director comprometido con su sociedad, con el momento internacional en el que vivimos y nos recuerda desde su cámara sensible y delicada que podemos, quizás, hacer un mundo mejor y más solidario. Una película que hace reflexionar y llega también al corazón. Carmen Pineda |
![]() ![]() ![]() |